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de mayo de 2004 Vol. 5, No. 4 ISSN: 1607 - 6079 |
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Infrarrojo medio Avanzando en la región espectral del mediano infrarrojo, las estrellas frías empiezan a desaparecer mientras que los objetos más fríos, como los planetas, los cometas y los asteroides, comienzan a ser detectados. Los planetas absorben la luz del Sol y se calientan, irradiando este calor en forma de luz infrarroja. Esto es diferente de la luz visible que viene de los planetas, que es luz reflejada del Sol. Los planetas de nuestro Sistema Solar tienen temperaturas entre 53 y 573 grados Kelvin, lo que implica que emiten la mayoría de su energía en el mediano infrarrojo. Por ejemplo, la Tierra tiene su máxima radiación a unas 10 micras. El polvo calentado por la luz de las estrellas constituye también una fuente importante de radiación en el mediano infrarrojo. El polvo interestelar empieza a brillar a medida que entramos en el mediano infrarrojo. El polvo alrededor de las estrellas viejas, que en sus últimas fases de vida expulsan gran cantidad de materia al espacio, alcanza su máximo brillo en el mediano infrarrojo. Algunas veces, este polvo es tan espeso que la estrella apenas puede verse en el visible, y sólo es detectada en el infrarrojo. Los discos protoplanetarios, discos de material que rodea a las estrellas que se están formando, también emiten en el mediano infrarrojo. Estos discos son, muy probablemente, las regiones donde los nuevos planetas se están formando. |