La Comisión Europea ha propuesto que este 2009 sea el "Año Europeo de la Creatividad y la Innovación", con el lema: "Imaginar. Crear. Innovar", para promover las propuestas creativas e innovadoras en diferentes sectores de la actividad humana, además de dar respuesta a los desafíos por enfrentar en un mundo globalizado. La creatividad, como la esencia de las estrategias innovadoras orientadas al aprendizaje, es un tema que debe incorporarse a las atmósferas educativas y convertirse en una realidad constante en las aulas.

En este sentido, los escenarios educativos merecen una renovación en diversos rubros. Sin embargo, se resalta la necesidad de una enseñanza en la que la creatividad sea uno de los elementos principales a desarrollar, sobre todo cuando la educación pasa por una crisis de adaptación a las nuevas demandas sociales, se encuentra ante el avance y la influencia de las nuevas tecnologías y es testigo de la generación de conocimientos científicos.

Es por esto, que la edición de nuestro número de diciembre es un reconocimiento a los creadores en el ámbito educativo. También es especial en diferentes sentidos: por el concepto abordado, que no es un tema fácil ni común, y porque la mayoría de los autores de los artículos son expertos comprometidos con el estudio y la investigación de la creatividad desde hace muchos, muchos años. A ellos manifestamos nuestra gratitud por su valiosa y desinteresada aportación en este espacio.

Ahora bien, los trabajos adoptan distintas dimensiones en el tema de la "creatividad", que van desde las estrategias para el desarrollo de la creatividad; las experiencias educativas que concluyen en la necesidad de implementar talleres de orientación para estimular el pensamiento creativo entre los alumnos; las reflexiones sobre lo enigmático que es la evaluación de la creatividad y la problemática que conlleva; las postulaciones por la universidad que queremos, resaltando las estrategias creativas en estas atmósferas; la evaluación de la creatividad desde un marco psicodinámico, y las investigaciones sobre la injerencia de la educación en el desarrollo de esta habilidad en los estudiantes de diseño, hasta textos que promueven el compromiso que los educadores deben asumir para utilizar herramientas creativas, que permitan reforzar el impulso al conocimiento en diferentes foros educativos.

El pensamiento creativo y la innovación son, en gran medida, la solución en la actual época de crisis económica, social y moral, de tal forma que es conveniente promover el pensamiento creativo e innovador en todos los sectores de nuestra sociedad. Después de todo: creatividad es pensar diferente, un proceso para la solución de problemas, mientras que el pensamiento creativo es el máximo recurso con que cuenta el ser humano, sin duda el más valioso.

Dra. María Teresa Esquivias Serrano