Ubicación histórica de la escena representada

Tal era el anfitrión que Reusch padre y su hijo mayor, Karl, habrían disfrutado en las reuniones dominicales. Esta escena, descrita de oídas por Christian Reusch en 1848 y plasmada por Dörstling en 1893, es un ejemplo del número y profesión de los invitados. Si bien Kant prefería variar frecuentemente de compañía, la escena incluye algunas de los invitados más frecuentes. Pocos de ellos son filósofos, pero todos son personas importantes del gobierno, la industria, el comercio o la intelectualidad de Prusia Oriental. El más conocido para nosotros es Johann George Hamann (1730-1788). Este filósofo, apenas seis años más joven que Kant, tuvo una actitud crítica hacia la filosofía de éste. Sin embargo, podemos constatar que conservaron siempre una muy buena amistad. El único otro filósofo de profesión que concurre en la escena es el joven Christian Jacob Kraus (1753-1807). Este discípulo de Kant se convirtió en profesor y colega suyo. Impartía la materia de filosofía práctica, derecho y filosofía natural. Posteriormente se interesó especialmente en la obra de David Hume y Adam Smith. Otro discípulos de Kant saquí presente es Ludwig Ernst von Borowski (1740-1831), pero éste no se dedicó a la docencia, sino a los sermones y administración eclesiástica. Fue consejero personal de Federico Guillermo III y su esposa Luisa, durante el exilio de éstos en Königsberg, tras lo cual fue nombrado arzobispo de Prusia. Los demás son personas cultas dedicadas a otras profesiones: Johann Konrad Jacoby (banquero proveniente de Pfalz), Robert Motherby (otro banquero, proviniente Escocia), Theodor Gottlieb von Hippel (Consejero de Guerra, Director de la Policía primero y Regente de la ciudad de Königsberg), Johann Georg Schaffner (Consejero de Guerra y escritor) y Karl Gottfried Hagen (Médico y farmacoquímico).